De los últimos 200 mil deportados o repatriados por las autoridades migratorias de Estados Unidos a México por las fronteras de Tamaulipas, al menos unos 165 mil tienen grado 1 y 2, lo que significa que tienen récord criminal, informó el diputado Rolando González Tejeda.
Agregó que sólo 44 mil cuentan con el grado 3, lo que implica que son deportados luego de interceptarlos intoxicados y sin papeles y por ello los echan, pero por delitos menores. Acusó a las autoridades americanas de no estar compartiendo la información sobre las personas que entran en este proceso y que tiene récord criminal.
El legislador mencionó que debido a que todas las fronteras están cerradas, las deportaciones se realizan por los puertos de Matamoros y Reynosa.
“Todas las fronteras están cerradas, las deportaciones se hacen por esos puertos de entrada, sin embargo no están compartiendo la información de quiénes tiene récord criminal, estamos hablando de que nos han repatriado a 165 mil personas con antecedentes de récord criminal de grado 1 y 2, y de grado 3 solamente son 44”, explicó González Tejeda.
Dijo que estos datos se conocieron en la Conferencia Legislativa Fronteriza recientemente celebrada en California, durante los días del 28 al 30 de marzo.
El legislador tamaulipeco se dijo preocupado por estas cifras tan alarmantes, por lo que señaló que van a elaborar un exhorto o punto de acuerdo para pedirle a la Secretaría de Relaciones Exteriores que verifique este tipo de operación o normatividad del memorándum, al que deberá hacérsele algunos arreglos, tras el cambio simultáneo de los presidentes de las dos naciones que son quienes lo suscriben.
“No queremos que se quede el estigma que ser repatriado o deportado es sinónimo de delincuente, sin embargo ellos dicen que hasta el mes de septiembre tendrán un plan piloto para empezar a mandar la información a la Secretaría de Seguridad Pública de México, para saber qué tipo de personas están deportando, si se diera la situación”:
González Tejeda descartó que el Instituto Nacional de Migración sea deficiente para atender esa problemática, y más bien culpó a los agentes migratorios de Estados Unidos de no avisarles en qué horario se harán las deportaciones.
“Los llevan al puente, se presupone que los tiene que entregar a los oficiales e informarles que esa persona tiene récord criminal, cosa que no ocurre”, concluyó.
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