El gobierno de Tamaulipas a través de sus dependencias educativas y de política interna, fue rebasado por la beligerante actitud de una simple trabajadora docente que hasta el momento presume haber ganado la batalla contra una menor de solo seis años de edad.
Y es que la pequeña Alejandra Hernández Hernández que debió ingresar como todo los demás niños a la escuela, el pasado 20 agosto, hoy continúa tocando las puertas de la primaria pública José Vasconcelos, sin éxito.
La directora del Plantel, Nora Elia Barrientos Alemán nuevamente le cerro la las puertas a la pequeña que no consiguió pagar la cuota de inscripción de 2 mil pesos.
El caso que llegó hasta el escritorio del Ejecutivo Estatal y del que salió la orden para que la mentora cumpliera con la obligación del gobierno de proporcionar educación gratuita a todo menor, no se ha acatado.
La maestra Barrientos Alemán continúa negando el acceso a la niña que ingresaría a primer grado y sin importarle la orden oficial del Estado y el exhorto del Sistema DIF Tamaulipas retó a las autoridades a desalojar a la infante y su madre mediante la fuerza pública.
Y fue más lejos al insinuar que su postura es avalada por el Sindicato magisterial que encabeza Arnulfo Rodríguez Treviño.
En este sentido la subsecretaria de Derechos Humanos de la Secretaría General de Gobierno, Mariana Rodríguez Mier y Terán, admitió que el caso ya esta fuera del alcance del Estado y propuso que la madre de la menor acuda a la Comisión Estatal de Derechos Humanos o la dependencia educativa a nivel federal.
«La señora, al presentar esta queja lo que hacen ellos (CEDH) es radicarla para ver el seguimiento que se va hacer y es competencia de la Comisión estatal de Derechos Humano y de la Secretaría de Educación Publica irle dando seguimiento«, dijo.
Y es que la imposibilidad de la autoridad local (SET) de hacer cumplir un mandato constitucional, propusieron como solución enviar a la menor a otra institución educativa en vez de sancionar a la directora. De la misma manera el gobierno del Estado propone a la parte afectada que acuda a otras instancias en tanto convencen a la directora de acatar los ordenamientos oficiales.
Abuela de la niña con un pie en la calle.
Paradójicamente la abuela de la niña Alejandra Hernández Hernández es empleada en el área de intendencia del mismo plantel que le niega el ingreso.
La mujer, a raíz del conflicto fue concentrada y advertida por la directora Nora Elia Barrientos de no tomar partido o sería despedida de su trabajo.
El caso también es conocido por la Secretaría de Educación que de la misma manera se declara incompetente para proceder. La abuela de la menor, día con día observa a través de las rejas de la escuela cómo, su nieta es rechazada por la directora sin poder hacer nada para ayudarla.