A unos días del inicio de la temporada de ciclones, la Conagua mantiene en alerta debido a que Tamaulipas es considerado como el segundo estado del país más vulnerable a sufrir inundaciones, después de Tabasco. El director general de Cuenca Golfo Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Roberto Schuldes Dávila, añadió que la región tamaulipeca de mayor riesgo es la zona conurbada de Tampico, Madero y Altamira, donde se ubica el sistema lagunario.“Ante esta situación, la Conagua ha invertido recursos para instalar un sistema de alertamiento de avenidas de agua en el cauce del río Pánuco, con el fin de informar a las autoridades en caso de que se presente algún riesgo para la población”, refirió.

De acuerdo con Schuldes Dávila, entre los municipios de Tampico, Madero y Altamira hay alrededor de 465 mil hectáreas en zona de riesgo debido a que se ubican en lugares muy bajas y altamente inundables por las fuertes avenidas del Río Pánuco.

“En la frontera también existen zonas de riesgo, sobre todo en los municipios de Matamoros, Reynosa y Río Bravo, principalmente porque son áreas ubicadas en las cercanías del río Bravo o de canales y sistemas de riego”, señaló.

Explicó que Tamaulipas sólo es superado por el estado de Tabasco, que es otra de las entidades que cada año sufre graves problemas de inundación.

Recordó que en 2007 y 2008 las inundaciones más importantes se registraron en el sur del estado, mientras que en 2010 fue la zona fronteriza la que más sufrió de inundaciones por los escurrimientos de las presas, y se vieron afectadas poblaciones rurales y urbanas de Reynosa, Río Bravo, Matamoros y Valle Hermoso.

El funcionario federal no especificó el número de familias que habitan las zonas con mayor vulnerabilidad, sin embargo, destacó que existe vigilancia de los tres órdenes de gobierno para evitar los asentamientos irregulares en zonas inundables.

Permitirlo, dijo Schuldes Dávila, sería exponer la vida de los habitantes, e incluso refirió que es prácticamente como ponerse una pistola en la cabeza o vivir sobre el mar.

Reconoció que el trabajo que se ha realizando en materia de prevención es evitar la creación de colonias populares sobre márgenes de lagunas, ya que dicha práctica era muy frecuente en gobiernos pasados.

Consideró que las familias que viven en áreas vulnerables deben ser reubicadas, ya que las obras de infraestructura no son la solución, y si bien son de gran ayuda en realidad no resuelven el problema.

[Milenio]