La subsecretaria de planeación educativa de la Secretaría de Educación de Tamaulipas, Lucía Aimé Castillo Pastor, advirtió que los instructores de idioma inglés en escuelas públicas no tienen su trabajo asegurado. Y es que el desempeño de muchos de ellos y el desinterés del estado en darle seguimiento a este programa ponen en la cuerda floja a los “teachers” de Tamaulipas. La funcionaria de la dependencia aclaró que los más de 2 mil 600 maestros de inglés con que cuenta Tamaulipas son objeto de una evaluación de su tarea docente y de los resultados del aprendizaje del alumno para garantizar la calidad educativa en la impartición del idioma inglés.
Sin embargo, admitió que de presentarse casos en el que los instructores puedan no cumplir con ese requisito de acuerdo a la percepción de los padres de familia quienes se encuentran más cerca del aprendizaje de sus hijos podrían actuar en contra de los instructores.
“Pueden ser despedidos en algunos casos, esa es una de las ventajas de que no cuenten con una base laboral”, admitió la funcionaria.
En ese sentido consideró que conforme se incluya en el marco del programa nacional de inglés los mecanismos que permitan no solo evaluar la tarea docente, sino el resultado del aprendizaje del alumno se podrá dar respuesta a los cuestionamientos y dudas que pueda generarse en algunos sectores.
Dijo que ya se ha identificado una mejora significativa del acercamiento con el idioma extranjero y al irse involucrando a parámetros y categorías de evaluación que se conocen como estándares internacionales sobre la enseñanza y aprendizaje se podrá mostrar la calidad de los programas.
Por: Claudia Zapata