Louis Corbett es un neozelandés de 12 años de edad que dentro de poco no podrá ver a causa de una retinitis pigmentosa, una enfermedad que ocasiona la progresiva pérdida de la visión.
Pero el niño sufrirá la perdida más rápido de lo normal. Frente a esto, los padres de Louis decidieron que su hijo realice un viaje para que pueda ver todo lo que desee.
Louis eligió como sus lugares favoritos: el Gran Cañón, las Cataratas del Niágara, el Empire State y la sede de Google en California. Además, quiso que se incluya en sus deseos presenciar un partido del equipo de basquetbol, Los Celtics de Boston.
Las peticiones del niño iban a hacer difíciles de cumplir, ya que estaba perdiendo la vista rápidamente. Gracias a la ayuda de Warren Casey, director ejecutivo de una compañía de software, y otras personas, la familia logró recaudar 25 mil dólares en menos de un mes.
La historia de Louis fue compartida por medios de comunicación y llegó a los oídos de Corinne Grousbeck, esposa del dueño de los Boston Celtics.
La familia Corbett viajará al estadio Celtic donde además estará la Perkins School for the Blind, la escuela más antigua para aquellos que tienen impedimentos visuales.
[NetJoven]