Hay formas de morir, múltiples y de todo tipo, pero si existe una insólita, esa es la de un joven rumano de 19 años que murió víctima del helicóptero que él mismo manejaba a distancia, a control remoto.

De acuerdo al testimonio de los testigos, el joven caminaba y desde el cielo se desmoronó el aparato golpéandolo en la cabeza, en el momento en que se encontraba con otros amigos.
Pese a los intentos por reanimarlo, los médicos declararon la muerte en el acto.
[El Intransigente]