Matamoros, Tamaulipas.- Provenientes de los estados de Oaxaca y Guerrero principalmente, y sus edades fluctuando entre los 16 y 17 años, la repatriación de menores no disminuye en esta frontera, afirmó Ismael Duque Sierra. El director del Centro de Atención al Menos Fronterizo (CAMEF), estableció que incluso muchos de ellos son reincidentes y en ello va implícito que dejen sus estudios truncos, ya que en sus intentos, abandonan sus escuelas, a las cuales no regresan a pesar de no haber logrado quedarse en Estados Unidos.
Explicó que en el mes de enero deportaron 121 menores, canalizados a través de CAMEF, mientras que en lo que va del mes (que está por concluir) ya van 120 adolescentes deportados.
Expresó que aunque la reincidencia es baja, de cualquier manera este fenómeno sí se presenta.
Duque Sierra manifestó que también hay niñas repatriadas, aunque son las menos y ellas argumentan básicamente que cruzan para reunirse allá en Estados Unidos con sus familiares.
Al regreso de los menores, solo les dan una plática sobre los peligros a los que se pueden volver a enfrentar en caso que decidan volver a intentarlo y se limita a eso, pues por el breve tiempo que se quedan en la casa, no pueden darles un tratamiento psicológico.
Ismael Duque Sierra, director del CAMEF, señaló que son diversos los peligros a los que se enfrentan los menores, como son el río Bravo mismo, ya que la mayoría de estos es así como cruzan; las grandes caminatas, las autoridades migratoria mismas y hasta un lugar al que denominan “la hielera” que no es otra cosa que un cuarto muy frío en lo que los exponen a muy bajas temperaturas, como una forma de castigo para que no vuelvan a desear cruzar otra vez a Estados Unidos.
Por: Isabel Rendón