Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El día de ayer 8 de julio, si no hubiera muerto, Héctor Alejandro Méndez Ramírez estaría cumpliendo 13 años de edad. Seguramente compartiría un pastel con su familia y después pasaría la tarde con sus amigos.
Desafortunadamente para él eso ya no fue posible, y en lugar del festejo sus padres Rebeca Ramírez y Francisco Javier Méndez, así como su hermana Emma Rocío, tuvieron que pasar cerca de dos horas en el Juzgado Primero Penal del Primer Distrito Judicial del estado para ratificar o en su defecto ampliar sus declaraciones sobre los hechos en que el menor perdiera la vida.
Puntualmente a las 11 de la mañana los tres integrantes de la familia Méndez Ramírez llegaron ante la instancia que los requirió, acompañados de su abogada.
Con andar pausado y la mirada triste llegaron a la Agencia del Ministerio Público.
Francisco Javier Méndez Vargas (padre de Héctor Alejandro) fue el primero en comparecer para ratificar su declaración. Después siguió su madre, Rebeca, quien a medida que escuchaba la declaración derramaba lágrimas al ir reviviendo por enésima vez la forma en que el menor de sus tres hijos fue sometido al juego denominado “el columpio” por cuatro de sus compañeros, lo que posteriormente la costó la vida.
La última en comparecer fue su hermana Emma Rocío.
La diligencia finalizó poco antes de las 13 horas.
Rebeca Ramírez expresó que tanto ella como su esposo y su hija sólo ratificaron las declaraciones, y por la parte acusada sólo se presentó el abogado defensor del prefecto de la Escuela Secundaria N° 7, Arturo Galaviz Hernández.
“Ya todo lo que se tenía que decir se dijo cuando declaramos, yo en lo personal no agregué nada más, ni mi esposo ni mi hija. Sé que va a haber justicia, tengo fe en Dios que nos va a hacer justicia, va a poner los medios para que se haga justicia”, dijo esperanzada doña Rebeca.
Agregó que las autoridades siguen buscando a la maestra Denisse Soiré Serna Muñiz, pero a pesar de todos los rumores que han corrido sobre su paradero, no hay nada en concreto, por lo que ratificó su confianza en que Dios para que se haga justicia y la principal responsable de la muerte de su hijo sea encarcelada.
“Me siento muy mal porque hoy estaría comiéndome un pastel con mi hijo, hoy estaría festejando su cumpleaños con él. Él hubiera andado con sus amigos festejando su cumpleaños, pero no, no estoy en esa fiesta, estoy aquí tratando de hacer justicia y así vamos a seguir, voy a seguir pidiendo justicia como yo pueda o como las autoridades me apoyen”, puntualizó.
[Gaseta]