El Tri cumplió en el inicio de su etapa de preparación rumbo a la eliminatoria mundialista con un triunfo contra Gales, que no deberá valorar tanto como el aprendizaje que debió dejarle el encuentro.
Aldo de Nigris aprovechó las ausencias de Javier Hernández y Oribe Peralta y se convirtió en el artífice de la victoria con un doblete que salvó una tarde en la cual el conjunto británico hacía todo lo posible porque fuera tediosa.
Dominador de principio a fin, el Tri de cualquier modo dejó ver sus carencias por el momento: la falta de ritmo de sus volantes Giovani dos Santos y Pablo Barrera, quienes fueron desequilibrantes sólo a manera de destellos.
También evidenció que Édgar Andrade puede aportar con mucho más de lo que hizo hoy, una vez que supere el nerviosismo pues apenas hoy disfrutó de su primera titularidad con el Tri, como también sucedió con el lateral Severo Meza, quien tuvo a tres compañeros más de Rayados en el once inicial: Luis Pérez, De Nigris y Zavala, este último quien salió por una dolencia en la rodilla al 62’ tras un choque con Sam Ricketts.
Por los contrastes y poca consistencia de los creativos, debió ser la defensa quien aportara el empuje al frente, donde por momentos eran Carlos Salcido, Francisco Javier Rodríguez y Héctor Moreno los elementos más peligrosos.
Si bien el Tri dominó a placer, incluso en casi todas las jugadas aéreas, el arquero Jason Brown fue factor para impedir que el marcador fuera más abultado.
Desde el minuto 6 le desvió un remate en mano a mano a Giovani, quien al 34’ envió un disparo que rozó el poste y al que en el segundo tiempo el arquero también le rechazó un cabezazo a quemarropa.
Varias fueron las jugadas que parecían terminar con tantos mexicanos, entre las cuales destacaron las que tuvo Andrade, quien pesaba por momentos por su gran sentido de la ubicación, pero el que quedó a deber por la falta de tino.
Antes de que la aburrición comenzara a reflejarse en las gradas, De Nigris remató de cabeza para el 1-0 al minuto 42’, cuando Meza centró y provocó la confusión entre el guardameta y su zaga.
En el segundo tiempo los mexicanos pisaron más cerca el arco contrario, pero todo quedaba en intentos por el remate que Brown le tapó a Meza o los disparos del “Maza” y Moreno que cruzaron el área chica al 53’.
Como réplica de lo sucedido en la segunda mitad, De Nigris apareció a punto de que finalizara el partido para empujar con el pecho un centro de Andrade y darle claridad al resultado, a falta de que el funcionamiento del equipo también despeje los nubarrones.
[MEDIOTIEMPO]