Sin haber firmado aún con Chivas y con la posibilidad de volver a México antes del partido ante Japón -el último del Tri en Copa Confederaciones-, Aldo de Nigris contempla un escenario de hasta seis semanas de inactividad por el problema de rodilla que el martes pasado le hizo abandonar muy temprano el entrenamiento y que ayer le dejó en la banca durante el partido frente a Brasil.
Ya sin algo que ver con el Monterrey, el delantero espera presentarse pronto en Guadalajara para ser valorado por el cuerpo médico de Chivas, someterse a unos eventuales exámenes físicos y, si todo sale bien, firmar su contrato como rojiblanco.
«Vamos a ver aquí con los médicos, ya me hicieron una valoración, vamos a esperar llegar obviamente al Club Guadalajara, que me valoren y ver qué es lo que se tiene que hacer», explicó.
«Traigo un golpe en la rodilla y algo que me molesta, ya sacaron los estudios, no es nada grave, gracias a Dios, pero sí hay que tomar medidas en ese aspecto, en mi recuperación, para poder estar yo al cien por ciento. Lo que me preocupa es eso, mi futuro, y estar al cien por ciento en Chivas en este caso».
El diagnóstico inicial por parte del cuerpo médico del Tri es un desgaste del cartílago que podría ameritar intervención quirúrgica para limpiarle la rodilla, lo que supondría aproximadamente mes y medio de recuperación.
«Lo más grave es una limpia que te hacen, son seis semanas de recuperación y poder estar para el torneo, pero hay que ver, hay que checar con la gente de allá», agregó.
De cumplirse el escenario negativo, De Nigris no estaría para iniciar el Apertura 2013, cuya Jornada 1 será en menos de un mes, el 19 de julio.
Además, dejará a México con sólo dos delanteros nominales (Javier Hernández y Raúl Jiménez) para el duelo ante los nipones este sábado en Belo Horizonte, sumándose así a la baja original de Oribe Peralta, convocado para esta competencia pero pronto descartado también por una lesión.
De Nigris reconoce un poco de incertidumbre por su futuro, a pesar de lo cual ansía vestir ya la camiseta rojiblanca.
«Obviamente estoy con las ganas de quedarme ahí, es algo que yo no esperaba, esto de la lesión en la rodilla, pero son cosas que tarde o temprano me podían haber pasado y que me tocó ahora que estoy acá en la Selección», agregó.
De cualquier modo, dijo que su transferencia significó sólo un movimiento en las alturas.
«Es un reto muy bueno, me voy de un equipo grande a otro equipo grande, así veo yo a Monterrey y así veo a Chivas, por su historia obviamente, es el equipo más popular de México, entonces creo que es un reto muy grande para mi», expresó.
Sin embargo, esa ilusión debe combinarla todavía con la tristeza por la eliminación mexicana de Copa Confederaciones, luego de la derrota de ayer ante Brasil, y particularmente porque ni siquiera pudo terminar la competencia.
«Obviamente te vas triste, yo por muchas cosas, por cómo se me dio acá, por la lesión, por el resultado, pero creo que el equipo jugó bien, al equipo de Brasil lo tuvimos preocupado en muchos momentos del partido y creo que salen con la cara en alto», señaló.
«Los malos resultados hacen que te vayas triste y que te vayas molesto, no me tocó estar, lamentable por eso, pero mis compañeros se entregaron al máximo y se jugó al tú por tú».
[MEDIOTIEMPO]