Convencer a los 124 socios del Atlas no fue tan complicado. Fue suficiente poner 500 millones de pesos y el respaldo de TV Azteca para adquirir a los Zorros. Pero con los dueños es otra historia.
No todos están contentos, pues la operación ha provocado infinidad de críticas por promover la multipropiedad que apenas en mayo se había prohibido.
El próximo lunes, cuando se reúnan los propietarios del máximo circuito para aprobar o no la venta de la escuadra rojinegra, la empresa de Ricardo Salinas Pliego presentará un argumento sólido para obtener el “sí”: La promesa de, en máximo cuatro años y medio, deshacerse del Morelia o de los propios tapatíos.
“Hoy estamos contraviniendo esa regla. Nos va a traer muchas críticas, pero trataremos de convencer a los dueños. No andan contentos. Hemos sido muy criticados en general, pero esperamos salvarla el lunes”, explica Gustavo Guzmán, presidente de Comité de Deportes de Grupo Salinas.
“Mi posición sigue siendo la unipropiedad, aunque sea contradictorio. Analizamos al Atlas, sus 97 años, su tradición, el estadio Jalisco. Proponemos obviar uno de los puntos que dice que desde mayo en adelante nadie podría volver a tener dos equipos”, añade.
Y aunque el panorama es adverso, tiene un as bajo la manga. “Creemos en la unipropiedad y debe reflejarse de aquí al 2018. Estamos comprometidos a garantizar que en cuatro años y medio seremos dueños de uno solo”, detalla el directivo.
Guzmán asegura que no está claro cuál de sus dos equipos sería vendido. “¿Cuál de los dos? Mentiría al decir uno u otro. No hubo plan para comprar al Atlas y tampoco hay plan para vender Morelia. Habrá incertidumbre estos cuatro años y medio, pero vamos a entregar al equipo que menos nos necesite”, concluye.
[Central Deportiva]