Junto con Vanessa Hudgens, Ashley Benson y Rachel Korin, la cantante dice que quiere liberarse de las etiquetas
Selena Gomez y Vanessa Hudgens quieren divertirse, pero esta vez no al estilo Disney, como en los programas que protagonizaron de niñas, sino como lo hacen los Springbreakers y a costa de lo que sea, incluso robar si es necesario.
Junto con Ashley Benson y Rachel Korine, las jóvenes vivirán al límite en la película que se estrena hoy en México.
«Creo que es difícil que la gente me tome en serio debido a la marca que me han asociado y de la cual estoy agradecida, pero la gente, obviamente tiende a etiquetarte», señala la novia de Justin Bieber sobre su decisión de aceptar un papel en que aparece como una chica que, junto con sus amigas, viven la fiesta y los excesos durante sus vacaciones.
«Cuando terminé de hacer la serie (Los hechiceros de Waverly Place) estaba ansiosa por empezar a hacer películas, y pensé que elegir la ruta del cine independiente, probablemente sería lo mejor para mí. Creo que si hay alguien con quien iba a correr ese riesgo y hacer esta transición, era con Harmony (el director)».
Quedó tan complacida que incluso retomó elementos de la película para grabar su nuevo álbum, el cual es el cuarto de su carrera y que está por estrenar. «El soundtrack me inspiró para hacer mi disco y quería que tuviera alguno de esos elementos».
Selena Gomez considera que «el mayor desafío es que tengo una generación joven de fans que me apoya y que significa todo para mí».
Y a esa generación, agrega, quiere llegarle a través de la actuación y la música.
«Algunas veces es complicado (combinar todo), ir de uno a otro, pero disfruto mucho ambas profesiones. No sé si podría sólo escoger uno porque tanto la actuación como la música son mis pasiones».
Vannesa Hudgens, de 24 años, recuerda las escenas audaces donde aparece vestida en bikini y portando armas. «Al principio de la filmación llegamos a la locación y Harmony nos dejó salir juntas, ser chicas sin que nadie nos viera y nada nos molestara, y nos llevamos tan bien, yo confié en estas chicas».
Ashley Benson, la estrella de la exitosa serie televisiva Pretty litle liars, del canal Boomerang, de algo está segura: no desea convertirse en una springbreaker en la vida real.
En el filme usa armas, amenaza a James Franco y se vuelve extremadamente violenta.
«Es muy divertido, nunca había hecho un personaje así, cuando leí el guión de inmediato me conecté con él; he hecho un show por años y siempre es lo mismo, ahora no».
Reconoce que usar armas en la filmación le impresionó mucho. «Son armas de verdad y la primera vez que tomé una, brinqué y me puse a reír. Ya luego estaba más tranquila, pero no dejaba de impresionarme».
Benson no teme que estos personajes de jóvenes en busca de experiencias extremas las encasillen en sus carreras.
«Pienso que a través de mi carrera voy a hacer diferentes personajes y ahora con el de Harmony se me han abierto muchas puertas, claro, no la podrán ver todos los que me siguen por ser niños, pero quienes sí, creo les va a gustar».
El hecho de haber tantas mujeres en el set, asegura Ashley, fue divertido incluso para el director. «En el set cada día llegaba y ponía música, él bailaba y siempre decía que todos nos divirtiéramos y lo logró, sin duda».
[El Universal]