Adolescente pide permiso a su madre para organizar una pequeña fiesta dentro de su mansión en construcción; todo se sale de control, llegan 2 mil chicos y causan daños materiales por 70 mil dólares
Un grupo de alocados adolescentes decidió organizar una fiesta dentro de una mansión en construcción en Ontario, Canadá, mientras sus padres no estaban en casa.
Los muchachos pensaban en una fiesta tranquila, tal vez una decena de «cuates», si bien les iba. Pero las cosas se salieron de control cuando los adolescentes comenzaron a promover la fiesta en redes sociales con el hashtag#MansionParty.
De un momento a otro, la pequeña fiesta juvenil se transformó en una parranda descomunal, con más de 2 mil adolescentes haciendo de las suyas por toda la mansión, ubicada en un lujoso barrio canadiense.
Afuera del caserón, había más de 60 autos estacionados, entre los que se incluye un autobús, que presuntamente habría llegado repleto de «chavos».
Según indica el periódico The Star, la fiesta fue organizada por Canice Ejoh, de 17 años de edad, quien habría pedido permiso a su madre, propietaria de la casa, para invitar a un par de amigos.
Algunos vecinos que fueron testigos de la llegada en masa de jovencitos con ganas de fiesta, informan que en el lugar no cabía un alfiler y entonces empezaron los problemas; peleas y destrucción, que según indican ascendió a un total de 70 mil dólares en daños.
[SDP noticias]