El delantero de Holanda Arjen Robben señaló que la selección mexicana cedió terreno en el juego de octavos de final, lo que permitió que su equipo se repusiera y obtuviera el pase en el tiempo regular.
«Tras el partido era difícil asimilar lo que acabábamos de alcanzar. Con solo tres o cuatro minutos por jugar. Estábamos eliminados del torneo. Y al final, en cinco minutos, con dos goles, dimos la vuelta a la situación. Sin necesidad de prórroga. Fue fantástico», dijo Robben.
El jugador del Bayern, sin embargo, temió por la eliminación. «En la primera parte jugamos mal. México tenía la posesión y eso había sido básico en los primeros partidos. Tendremos que mejorar ese aspecto ante costa Rica. Fuimos más fuertes con el balón», apuntó.
«El equipo cambió en todos los sentidos. Jugamos con tres atacantes al final y se echaron para atrás. Incluso sustituyeron a su delantero. Nos dieron la iniciativa un poco y creamos ya muchas ocasiones», dijo sobre México.
Los jugadores que salieron desde el banquillo tuvieron una aportación decisiva. «Van Gaal estuvo acertado. Sabe que tipo de jugadores tiene y como cambiar las cosas. Otros que estuvimos en el campo desde el principio tuvimos nuestra aportación e influencia. Esa es nuestra fuerza».
Robben señaló que quiso tirar el penal decisivo que transformó al final Jan Klaas Huntelaar. «Fue una decisión muy sabia. Él vino desde el banquillo estaba fresco y es un goleador. Yo tenía confianza en él. La misma que si hubiera tirado yo».
Pensando en Costa Rica
Robben habló sobre el cambio de imagen de su equipo en el terreno de juego, con menos posesión y dominio, consensuado con el técnico Louis Van Gaa.
«Es verdad que estamos acostumbrados a jugar 4-3-3. Un futbol de ataque con dos extremos. Pero creo que también hay que mirar la calidad de la plantilla. No es un sistema tan dominante como estamos acostumbrados a jugar, pero sigue siendo muy bueno. Hemos jugado cuatro partidos y marcado 12 goles. Es bastante positivo, por lo tanto», explicó el atacante.
La derrota en la final del 2010 es un estimulante más para el combinado orange, aunque. Robben prefiere no presionarse. «Estamos todos juntos en esto y cuando se llega a una Copa del Mundo no es para disfrutar del clima y de la playa en Río. Estás para ganar partidos y llegar lo más lejos posible. No creo que las expectativas fueran muy altas antes del torneo. Podemos estar muy orgullosos de donde estamos», añadió.
Ante Costa Rica el equipo holandés buscará estar de nuevo en las semifinales. «Costa Rica es un equipo muy fuerte. Tenemos que mantener la concentración. Costa Rica tiene un muy buen equipo, como ha demostrado en la fase de grupos, que era muy difícil, con Italia, Inglaterra y Uruguay. Ha sido realmente impresionante y que tendremos que preparar muy bien si queremos ganarles».
[CNN]