La cámara que llevaba incorporada el casco de Michael Schumacher cuando sufrió un accidente de esquí el pasado 29 de diciembre tomó imágenes válidas para la investigación de lo ocurrido, informó hoy el diario galo «Le Dauphine Libéré».
Las imágenes pueden ser empleadas por los investigadores, señaló el diario, que indica que podrían suministrar datos sobre la velocidad a la que esquiaba el ex piloto alemán de Fórmula 1, que permanece en coma desde que sufrió el accidente.
Hasta ahora había dudas sobre si la cámara funcionaba cuando Schumacher, que el pasado viernes cumplió 45 años, chocó con una roca cuando esquiaba fuera de pista en la estación de Méribel, en los Alpes franceses.
La Fiscalía y los investigadores franceses que se ocupan del accidente de esquí tienen previsto explicar el miércoles en conferencia de prensa la situación de sus pesquisas.
La comparecencia, a cargo del fiscal Patrick Quincy, se celebrará a las 11.00 locales (10.00 GMT) en el Palacio de Justicia de Albertville (este).
Con esa ocasión se pretenden explicar los elementos de que disponen para aclarar cómo se produjo la caída del expiloto.
Schumacher se encuentra en estado crítico, en un coma inducido desde el 29 de diciembre, día en el que fue ingresado en el hospital de Grenoble.
Los responsables del hospital comunicaron el lunes que Schumacher se encuentra «estable», pero su estado sigue siendo «crítico» y, en un comunicado, precisaron que está continuamente vigilado con los tratamientos que se le administran y que el equipo médico «sigue juzgando la situación de Michael crítica«.
El siniestro fue grabado de forma casual por un alemán que también estaba esquiando en la misma zona, y que afirmó al semanario «Der Spiegel» que Schumacher no iba a gran velocidad en el momento del siniestro, una cuestión que podría tener importancia para una eventual fijación de responsabilidades.
La investigación de la justicia francesa busca determinar las circunstancias del accidente y establecer si pueden derivarse responsabilidades, por ejemplo en razón de una señalización de los límites de las pistas que se considerara deficiente.
Hoy además la esposa del expiloto, Corinna, se dirigió a los medios de comunicación a través de Sabine Kehm, portavoz del campeón, para pedir que «dejen tranquila» a la familia.
«Tengan confianza, por favor, en las declaraciones de los médicos y abandonen la clínica», declaró Corinna Schumacher, quien agregó: «por favor, apóyennos en nuestro combate común por Michael».
[Central Deportiva]