Los goles de Cristiano Ronaldo y Gareth Bale corrigieron los errores defensivos del Real Madrid en Turín, en una noche para el olvido de Raphael Varane, donde el conjunto madridista extendió una mala racha de 51 años sin vencer pero dejó al Juventus sin margen de error (2-2).

El primer empate en Turín de un duelo con historia en Europa dejó dos caras del Real Madrid. Errores defensivos contra pegada. Las malas y buenas noticias de un equipo que salen a relucir en un mismo partido. De la preocupación del primer acto, con un estilo falto de personalidad, a la demostración de superioridad en casa del Campeón italiano con un ataque demoledor.

La inseguridad a domicilio del Real Madrid en Liga se trasladó de inicio a Champions League. Carlo Ancelotti busca soluciones, preocupado por las numerosas llegadas de los rivales. En su desesperación llegó a una solución impensable a inicios de temporada. Con Álvaro Arbeloa y Dani Carvajal en perfectas condiciones, apostó por cambiar la demarcación de Sergio Ramos. El andaluz aúna las mejoras cualidades de los dos, defiende fuerte y es peligroso en ataque, pero olvidó los automatismos del lateral.

El Real Madrid fue superado en el primer acto. Intentó frenar el ímpetu de una Juve necesitada de una alegría para reengancharse a la Champions. Tocó, amparado en la figura de Xabi Alonso de inicio, para frenar la salida en tromba del conjunto italiano. Pero con la posesión de balón no genera peligro. El manual con el que llegó Ancelotti acaba en el olvido y sus jugadores vuelven al pasado. A ese contragolpe veloz que instaló José Mourinho y que con la llegada de Gareth Bale aún puede ser más letal.

Solo corriendo llegó el Real Madrid a Buffon. Así Cristiano rozó el palo con su remate cruzado y Bale probó al guardameta italiano, una leyenda en el futbol. Fue un espejismo porque cuando el Juventus subió el ritmo, forzó el retroceso de un equipo que se amparó en la figura de Iker Casillas.

Ancelotti dio por zanjado el debate y es un arma de doble filo. El Real Madrid no para de encajar tantos en Liga y aparece el Capitán en Champions League con sus paradas salvadoras. La primera tras un intento lejano de Pogba, a un remate en propia puerta a bocajarro de Pepe ante el que Iker respondió con reflejos. Con la misma velocidad sacó un testarazo picado de Marchisio.

El panorama comenzaba a oscurecerse en Turín. Como siempre ocurre en una ciudad donde el Real Madrid solo ganó con un gol de Di Stéfano hace 51 años. Los errores defensivos asomaron. Con Pepe dejando metros en el marcaje al rival, Ramos impreciso en la salida de balón y Varane cometiendo un error de juventud. Fue al suelo sin pensar que Pogba no tenía salida, escorado al arco, y lo barrió. El empuje tenía su premio desde el punto de penalti. Vidal no dudó y colocó en la escuadra su lanzamiento. Imparable para Casillas.

La reacción en el segundo acto partía de la colocación del Real Madrid. Sólo atacó con su tridente imponente en la primera parte, necesitaba ayudas de jugadores de segunda línea. Cuando Modric se descolgó y apareció o los laterales llegaron a línea de fondo, el panorama fue cambiando.

Si se le suma un regalo, el cielo se esclarece. Lo hizo Martín Cáceres, en una mala salida de balón que acabó en gol de Cristiano Ronaldo. Benzema asistió y el portugués la rompió en carrera en su octavo tanto de la Fase de Grupos. Un nuevo registro histórico.

Acusó el golpe una Juve que se tambalea en Europa en un grupo que se antojaba asequible. Y lo pudo tumbar el Real Madrid. Xabi Alonso disparó al travesaño desde 30 metros y después de que Casillas volviese a lucirse ante Marchisio, tras un error de marcaje de Varane con Pogba, en una jugada que acabó salvando Pepe bajo palos, llegó un nuevo mazazo a la contra. Cristiano vio la carrera de Bale, que lanzado soltó un latigazo a la red

El Real Madrid estaba clasificado a Octavos de Final. Sólo tenía que defender el resultado media hora pero un nuevo error defensivo lo impidió. Varane perdió de vista un balón colgado desde el costado derecho y acabó perdiendo también de vista a Fernando Llorente, que a placer cabeceó el empate.

Acabó contemporizando el encuentro el equipo de Ancelotti, dando por bueno un punto que le clasifica virtualmente, y con Casillas respondiendo bien a los disparos de Tévez y Quagliarella. El Real Madrid camina firme hacia el pase a Octavos como líder y deja al Juventus al borde del abismo.

[Medio Tiempo]