Gareth Bale corre peligro de tener que pasar por el quirófano y en caso de operarse, podría estar unos cuatro meses de baja.
Como informa este sábado el diario Marca, el internacional galés del Real Madrid sufre una hernia discal, que ya le fue detectada el día de su presentación, pero que el club presidido por Florentino Pérez prefirió esconder.
Los médicos del club blanco diagnosticaron el problema cuando el internacional galés pasó la revisión previa a su mediático posado como nuevo jugador ‘merengue’ el pasado 2 de septiembre.
Gareth dijo que no tenía dolores
Bale insistió en que no sufría dolores en la zona y el fichaje más caro del mundo se acabó cerrando pese a que Gareth presentaba una lesión detectada en la resonancia magnética practicada en la Clínica Sanitas en la Moraleja.
Las molestias han ido en aumento y ahora jugador y Real Madrid deberán decidir qué hacer al respecto.
[Mundo Deportivo]