El artista chino Cao Hui es hasta el momento uno de los artistas asiáticos más reconocidos dentro del ámbito artístico.

Su obra no es la más hermosa en cuanto a estética, pero es esa mezcla entre rareza y realismo lo que lo han colocado en el ojo de la crítica plástica.

Con su obra ha logrado crear un diálogo entre el espectador y su obra. Las esculturas de Hui son totalmente al estilo Gore, a pesar de que se tratan de piezas de uso cotidiano como sillones, lámparas y demás, cada objeto se convierte en un contenedor de vísceras, sangre y huesos expuestos.

Su mensaje va más allá de un perfil estético o práctico… Hui nos muestra la relación que hay entre el interior de algo y el físico, que lo importante no está a simple vista y que la comprensión de las cosas se logra de adentro hacia afuera.

De hecho, como parte de su disección ha incluido piezas como La Venus de Milo y el David en las que se puede apreciar algo más que piedra.

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