Igual de entretenida y bien realizada, aunque menos propositiva e imaginativa que la primera, es en lo que coincide la crítica especializada

Hay que reconocer que J.J. Abrams, Roberto Orci y Alex Kurtzman la tenían difícil. Superar la primera gran apuesta que el equipo realizó de una de las franquicias de ciencia ficción más importantes del entretenimiento no era tarea sencilla. “Star Trek”, en 2009, fue un gran éxito no sólo en taquilla, y no únicamente con la crítica, sino que salió bien librada ante los millones de fans que han convertido a la nave Enterprise en su lugar imaginario favorito y al capitán Kirk y su compañero Spock en sus ídolos espaciales.

“Star Trek: En la Oscuridad” llega hoy a los cines mexicanos y aunque pocas críticas especializadas han aparecido, la suerte de esta segunda entrega de Abrams y secuaces —no se debe, nunca, dejarlos de lado, ya que son los verdaderos fans de la historia que inició en los 60— no ha sido tan similar a la de su predecesora. Sin embargo, estas primeras críticas también revelan que la cinta es audaz y está muy bien realizada,(hay que recordar todos los guiños que ésta ofreció a los más sentimentales fans, como la presencia del Spock de la serie original, Leonard Nimoy, y el final que incluyó la frase que daba inicio a la apuesta televisiva).

En esta segunda película, aunque con Nimoy de vuelta en la historia y con todos los personajes queridos por los seguidores (Bones, Uhura, Scotty y Sulu, por ejemplo), apuntar al sentimentalismo no será suficiente. La inteligencia de los guionistas de “Fringe” y del director de “Super 8” consistió en abrirse un sinfín de posibilidades al proponer, desde el primer filme, un cambio de giro en la historia que inicia con la ruptura del espacio/tiempo propiciada por el villano Nero al enviar a Spock al pasado. Esto, en la trama, abre una segunda línea temporal, una realidad alterna que permite al equipo de creadores apostar por nuevas historias de Star Trek sin ofender a quienes esperan las tramas más singulares y conocidas de la extensa franquicia —seis series de televisión, incluyendo una animada, y 11 películas.

Las buenas críticas

La mayoría de los críticos, hasta el momento, han destacado que “Star Trek: En la Oscuridad” está muy lejos de ser una mala película. Sin embargo, todos la comparan con la primera cinta y esto la coloca por debajo.

Scott Foundas, de Variety, ha sido el más encantado con la secuela: “Notablemente mayor en escala, aunque nunca en detrimento de sus bien armados personajes humanos (y semi-humanos), puede que ‘En la Oscuridad’ no se atreva a ir adonde ninguna otra Star Trek ha ido antes, pero el camino a su destino es inmensamente placentero y tan bien confeccionado que habría que ser vulcaniano para encontrarle peros”.

También Ian Freer, de Empire, alaba el trabajo de Abrams y sostiene que con esta segunda cinta, la franquicia “Star Trek” se mantiene.

“Si ésta es la ‘última frontera’ de Abrams, ha dejado Star Trek en una buena posición, tanto dentro del universo de ficción como en el estado de la franquicia. En cierto sentido, el título es engañoso. ‘En la Oscuridad’ es explosiva, divertida, graciosa, espectacular y estimulante”.

Aunque Andrew Pulver, de The Guardian, la compara en cuanto a los destellos visuales con un video de Kylie Minogue, asegura que la experiencia vale la pena. “TNo es probable que la gente salga del cine con el mismo nivel de regocijo que en 2009, pero es un trago clarividente y excitante”.

Y Dave Calhoun, de Time Out London, habla bastante bien del nuevo villano de la historia, Khan, interpretado por Benedict Cumberbatch.

“Cumberbatch opta por una imperiosa arrogancia teatral en vez de esconderse. Su malo es marcadamente humano, quizás algo bidimensional, y consigue transmitir auténtico hielo corriendo por sus venas mientras aporta algo de peso a un reparto que ofrece más simpatía que seriedad”.

Queda debiendo

Según bajan las calificaciones, la crítica común entre los menos convencidos es que la cinta abusa de los efectos visuales y que es menos concluyente que la primera entrega.

Oliver Lyttelton, de The Playlist, indicó que la primera hora es grandiosa, mas no el resto del filme, que cae sin ningún fin específico.

“Cuando llegan los créditos finales tienes la sensación de haber quedado hambriento e insatisfecho; te has subido a una atracción decente, pero no te ha llevado a ningún sitio una vez que acaba. ‘En la Oscuridad’ está muy lejos de ser un desastre, pero es difícil no sentir que la caja del misterio de Abrams esta vez ha resultado estar vacía”.

Y si de críticas menos favorecedoras se trata, hay que retomar la de Todd McCarthy, de The Hollywood Reporter, quien critica directamente el trabajo de Abrams en la dirección.

“La segunda entrega de J.J. Abrams para la franquicia eterna parece ser más un trabajo de ingeniería que de dirección de cine, calibrado para provocar cada sensación a tiempo (…) Después de impresionar en sus anteriores trabajos de dirección para la gran pantalla, aquí Abrams se demuestra más limitado, con menos imaginación; hay poco sentido estilístico, elegancia o despuntes de imaginación”.

[Vanguardia]