La delantera felina sufre una falta de efectividad a la hora de patear a gol, el entrenador explica esta situación y reitera su confianza a su ofensiva

Pumas acusa una falta de puntería a la que no se le encuentra una pronta solución. La ofensiva universitaria no logra explotar la metralla, dispara todas las balas que habitan en la recámara, pero los tiros son de salva. No hieren al enemigo.

La efectividad de la ofensiva es paupérrima, apenas cuatro goles en cinco juegos; de esos cuatro, solo uno es de un delantero: Martín Bravo. El resto de un mediocampista: Javier Cortés.

Eduardo Herrera, Robín Ramírez, Martín Bravo, Luis García y Alfonso Nieto son los encargados de la parte ofensiva de Pumas. De ellos, Herrera y Ramírez son los que más actividad han tenido, pues Bravo estuvo lesionado y García y Nieto han pasado más tiempo en la banca.

En cinco partidos disputados hasta ahora, la delantera de Pumas ha gozado de ocasiones, siendo los juegos contra Atlas y Santos en los que más se ha chutado a gol, pero en ambos casos los duelos terminaron en empates. Contra los rojinegros, Universidad lanzó hasta 21 tiros a Miguel Pinto, de éstos solo 10 tuvieron dirección a los tres postes y apenas uno entró. Contra los laguneros fueron 18 los disparos, pero solo 8 al arco de Oswaldo Sánchez, incluido un penal. Ninguno entró.

En los otros tres juegos la suerte tampoco ha sido la mejor, y en el contra Querétaro es en el que menos se han gozado de tiros a gol, un partido que se complicó en demasía por la expulsión de Marco Palacios y que obligó al equipo a retroceder metros con la ventaja momentánea, y cuando tuvo la necesidad de buscar goles, la sala de máquinas no funcionó.

Antonio Torres Servín, entrenador de Pumas, explicó cuál es la situación que atraviesa su aparato ofensivo, consideró que las fallas que se han presentado “son por las mismas ganas de terminar la jugada con gol, eso los lleva a la ansiedad por hacer el gol y de repente creo que no están tranquilos para tomar la mejor decisión; en el último partido tuvimos algunas posibilidades no se hicieron, pero hay que seguir trabajando en eso, seguir dándoles la confianza, que tengan la calma y no les gane la ansiedad, quizá es mejor perder un segundo para poder definir bien”.

Sin embargo, lejos de presionarse por la carencia de efectividad, Torres Servín lo ve con filosofía. “Lo tomo de una manera positiva porque ellos quieren terminar bien la jugada, quieren hacer el gol, entonces esa ansiedad es la que de repente puede llevar a fallar, pero estoy seguro que los delanteros de nosotros cuando metan una van a tener más tranquilidad y más calma”.

Pues bien, el fin de semana toca visitar a Cruz Azul, el primer clásico de la temporada y en un momento en el que se necesita un resultado que cambie el panorama de irregularidad que atraviesa el conjunto universitario. “Vamos a un partido complicado, pero creo mucho en el equipo y vamos a salir a jugar este partido con toda la responsabilidad y con toda la intención de ganarlo”, advirtió Torres Servín.

El entrenador apuntó que es consciente que semana a semana se juega el puesto, pero confía en que la directiva tenga paciencia y confíe en el proyecto que ellos mismos diseñaron.

“Obviamente si no ganas y pierdes y no sumas estás más cerca de esa posibilidad, pero estoy confiando mucho en el trabajo que estamos haciendo y confío en el equipo en que vamos a salir adelante. El respaldo (de la directiva) está, obviamente la tranquilidad la da los resultados, pero el respaldo está”.

[La Afición]